miércoles, 3 de septiembre de 2014

La edad y las señoras

Este fin de semana pude, finalmente, llegar a una conclusión sobre qué te hace señora. He aquí mi descubrimiento:

Debemos empezar por decir que tengo 32 años, y no estoy casada.

Ahora, para el DRAE, una señora es:
4. m. y f. Persona respetable que ya no es joven.
5. m. y f. Título que se antepone al apellido de un varón o de una mujer casada o viuda. 

En cambio, una señorita, es:
4. f. Término de cortesía que se aplica a la mujer soltera.

Así pues, podemos tener bien claro que la diferencia entre una y otra es estar o no casadas. Mi papá, que es un gran filósofo y teórico (¿?), un día dijo que una señorita era aquella mujer que no hiciera evidente que le daban (el término dar aquí, se refiere a darle, eso, sí, eso), es decir, sería señorita si no estaba casada o tenía un hijo [no sé por otros lados, pero aquí en México es MUY común que sean madres "solteras"]. 

Podrá ser una definición más decente que la otra, más poética que la otra, pero al final se refieren a lo mismo. Una es señora si está casada o tiene hijos.

No sé por qué, pero tengo varias conocidas casadas, sin hijos, que se molestan cuando les dicen señoras, como si fuera una ofensa, o significara que ya están o se ven viejas... Parece que el concepto ya no significa lo mismo que antes, y no sé qué pasó. También, he visto a muchas mujeres de mi edad que les dicen señoras  y no lo son, o (como es mi caso) que nos dicen señoritas y sólo excepcionalmente, señoras.

Entonces, surgió en mi cabeza la pregunta de ¿qué es ser una señora? [Ja, me sentí como Freud al preguntarse ¿qué es lo que quiere una mujer? ja ja ja. Ya parece, yo y Freud, similares, qué pretenciosa la muchacha] y obtuve una respuesta satisfactoria.

Las señoras no son las que están casadas o las que tienen en hijos, serás señora en el momento en que se parezcan a lo que cada quien (es decir, yo, en este caso) asocia al concepto de mamá. Porque hay que ser honestos, para todos, sin importar el momento o la edad, vemos a nuestras madres como señoras, no puede ser de otra forma. Así, yo no soy una señora porque no me veo como se veía mi mamá a mi edad, porque ella a mi edad tenía dos hijos de 10 años, vestía traje sastre, tenía arrugas en la cara (pocas, pero algunas), estaba divorciada... Y se veía como un adulto. No sé de qué otra forma explicarlo, pero es así de fácil.

Y esto es algo que lo aplico a cualquiera, tengo amigas o conocidas que han sido señoras desde los 20 o antes, porque se visten como una, se comportan como ellas, usan joyas de oro con piedritas, como las señoras de antes, se tiñen el cabello para esconder las canas, no usan tenis ni se ven cómodas en jeans y playera...

¿Qué opinan ustedes?

P.D. A este paso y con estos criterios, yo  JAMÁS seré una señora. :)


1 comentario:

  1. La verdad es que la primera vez que un imberbe te llama "señora" por la calle es un shock. Jajajaja. De todas formas, dicen las normas de protocolo que el término "Señorita" está en desuso así que habrá que acostumbrarse... Un besote!!!

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¿Soy sólo yo?